S&I Sudamérica Sur

Historias de Éxito – 18/1/2024

Un Camino de Fe: El Viaje Espiritual de Luis

La influencia positiva del Instituto y la Obra Misional en la vida de Luis, narrada por su amigo Facundo Campos.

Una vez más vimos cómo los alumnos participan de la Obra Misional, y aprovechan el Instituto para invitar a sus amigos a aumentar su fe en Jesucristo. Esta historia es relatada por Facundo Campos, alumno del Instituto.

«A Luis lo conocí en la secundaria. Cuando comencé a ir a Instituto a él le llegó mi invitación. Este año aceptó y nos visitó, Luis se interesó y sintió de manera muy personal las enseñanzas acerca de las familias eternas, se encontraba más feliz y animado para con la vida y las aflicciones y él no sabía por qué, yo sí lo sabía, Cristo hacía y hace la diferencia en su vida.  Hasta que un día se dio cuenta de que quería acercarse más a Dios, y me hizo esta pregunta ¿Cómo puedo hacer para unirme a la Iglesia? Al poco tiempo tuvimos nuestra primera charla con los misioneros.»

«Recién ahí fue cuando realmente caí en el hecho de que Luis estaba muy preparado y que tenía metas para cumplir. Su mayor anhelo era poder entrar y participar del Templo, no le importaban los cambios que debiera hacer para lograrlo, había escuchado de la importancia de estar ahí, de las cosas tan maravillosas que hacían y lo que podía sentir dentro de la Casa del Señor, él quería experimentarlo por sí mismo. Lo acompañé en sus primeras preguntas y en sus primeras visitas a la Iglesia de su barrio, cuando nos dimos cuenta, habían pasado varios meses desde que entró a Instituto (nunca faltó a una clase) y ahora los dos nos encontrábamos vestidos de blanco en el día de su bautismo.»

«Hoy en día, Luis pudo cumplir su meta y sabe que ahí no terminó todo, invitó y acompañó a sus amigos a Instituto. Comparte conmigo las lecturas que hace del Libro de Mormón y lo que hablan los domingos. Lleva a sus primitos a la Iglesia en bicicleta y coordina con los misioneros para tener charlas con su familia. Está progresando hacia su otra meta, la de servir en una misión y no pierde la oportunidad de decirme lo agradecido que está conmigo por haberlo invitado. Y yo estoy agradecido al Señor por dejarme ser una de las herramientas diligentes que él necesita para llevar a cabo su obra.»

Facundo (izquierda) y su amigo Luis (derecha)